El tribunal cumple el trmite de comprobar que se trata de juristas «de reconocida competencia con ms de 15 aos de ejercicio profesional»
El Pleno del Tribunal Constitucional (TC) ha dado este jueves el preceptivo plcet a los cuatro nuevos magistrados que después de jurar el cargo ante el Rey se incorporaron al tribunal. La operación era sencilla porque los únicos requisitos que marcan la Constitución son que deben ser magistrados, fiscales, profesores universitarios, funcionarios o abogados, además de jurista «de reconocida competencia con más de 15 años de ejercicio profesional».
A los 11 magistrados que han demostrado en el pleno -presencialmente o por vía telemática- han bastado pocos minutos para verificar por unanimidad el cumplimiento de los requisitos. Solventado el término, los magistrados electos deben ahora jurar su cargo ante el Rey, previsiblemente la próxima semana, para incorporarse ya de forma efectiva al TC.
Dos de los nuevos miembros del tribunal lo serán por decisión directa del Gobierno. Es el exministro de Justicia y exdiputado del PSOE Juan Carlos Campo y la exabogada de La Moncloa Laura Díaz. Los otros dos lo serán por designación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ): el conservador César Tolosa y la progresista María Luisa Balaguer.
La primera tarea de los nuevos magistrados y de los otros siete que siguen en el tribunal ser la eleccion del presidente. La mayora progresiva indica que el puesto lo podran ocupar Cndido Conde-Pumpido allí María Luisa Balaguer. El primero es el preferido del Gobierno.
La segunda, que como el ex fiscal general aspira al puesto, podrá contar con el apoyo de los cuatro magistrados conservadores, que la preferiran frente al más conflictivo candidato de La Moncloa. Sumando su propio voto, Balaguer solo necesitara uno más para alcanzar los seis queguarantizan la Presidencia. La decisión de bloquear la progresión del CGPJ para renunciar a un candidato inicial -Jos Manuel Bandrs, apoyo seguro de Conde-Pumpido- abre la puerta tiene ese resultado si el finalmente segoviano se decanta por el perfil de Balaguer.
La ley que regula el Constitucional establece que la votación es secreta. En la primera ronda es elegido quien obtiene la mayora absoluta. De no alcanzarse, en la segunda venta elegido quien obtenga más votos. En caso de impate se vulve a votar y si persiste la igualdad se elige a quien sea más antiguo en el cargo o, subsidiariamente, el de mayor edad. Este último criterio favorece a Conde-Pumpido.
Formalmente como magistrado del TC para alcanzar la Presidencia, pero hasta ahora esta se ha reservado a quienes están en el último tercio del mandato de nueve años. Entre la mayora progresista, en su situación están Conde-Pumpido y Balaguer. El nico conservador es Ricardo Enrquez, que previsiblemente ser elegido vicepresidente por el mismo sistema.
El cuarto con esa antigüedad, Alfredo Montoya, renuncia el pasado mes de junio por motivos de salud. Su sustitución corresponde al Senado por mayora de tres quintos, pero la falta de acuerdo entre PP y PSOE ha hecho imposible hasta ahora una nueva designación. Aunque este acuerdo llegara, existirá la mayora progresista del tribunal, con siete magistrados frente a cinco conservadores.
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