Fue a través de un mensaje de voz sibilina que tomó contacto, luego de enterarse que El mundo investigaba sus proyectos de hombre libre: «Soy… Charles Sobhraj… Si puedes llamarme… Para algo importante». Gracias. »
Apodado “la serpiente” – por su habilidad para evadir a las autoridades en el sudeste asiático en la década de 1970, después de seducir y robar a los mochileros reunidos sus pasaportes y dinero, a menudo drogándolos, a veces matándolos, según la justicia – Charles Sobhraj ha sido discreto desde su liberación el 21 de diciembre de 2022. Esta llamada, por lo tanto, delata su intención de revivir su leyenda sulfurosa, en un segundo plano desde que fue encarcelado en 2003 en Nepal, por un doble asesinato que se remonta a 1975.
Pero ¿por qué darle la palabra al hombre que lanzó al periodista australiano Richard Neville, coautor con Julie Clarke de su primera biografía (La vida y los crímenes de Charles Sobhraj1979, sin traducir) : “Mientras pueda hablar con la gente, puedo manipularla” ? ¿Qué crédito darle cuando, durante las entrevistas, confesó sórdidos asesinatos antes de negarlos? ¿Cómo acercarse sin a priori a aquel cuya sombra pende, desde mediados de los años 70, sobre una docena de homicidios sin resolver de mochileros revelados?
Nacido en 1944, fuera del matrimonio, en Saigón, de padre indio y madre vietnamita, luego adoptado por el soldado francés con quien se casó, Charles Sobhraj creció en Marsella y luego en París. Cayó en la delincuencia desde muy joven: hurto, robo de coche, asalto… En 1970 partió rumbo a la India con su mujer, Chantal Compagnon. La pareja vive en Bombay de esquemas y estafas. Tienen una niña allí.
Recluso destacado
En 1971, Charles Sobhraj se envalentonó con el audaz robo de una joyería en el Hotel Ashoka en Delhi. Sedujo y secuestró a una bailarina estadounidense cuya habitación está encima de la tienda, le hace un agujero en el suelo y la carga con una bolsa de diamantes que lo arrestan en el aeropuerto. Escapa de prisión simulando un ataque de apendicitis. Retirado y luego liberado bajo fianza, salió de la India con su esposa hacia Afganistán, Turquía, Grecia, donde siguió siendo miembro de los tribunales y prisiones. Mientras tanto, Chantal lo dejó para comenzar una nueva vida en los Estados Unidos.
En 1975, Charles Sobhraj estaba de regreso en Bangkok. Bajo el alias de Alain Gautier, ahora comparte la vida de Marie-Andrée Leclerc, una joven secretaria médica de Quebec a quien presenta como su esposa. Se hace pasar por traficante de piedras preciosas y se dedica al tráfico de heroína. También ve a jóvenes mochileros a los que da la bienvenida a su casa y los droga antes de robarles. Varios jóvenes que tienen gravedad a su alrededor son encontrados muertos.
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