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Malestar y preocupación en los equipos especiales ante la «falta de efectivos» y la transferencia de activos de unos grupos a otros

Cordón policial en la vivienda de Escalona (Toledo) donde una mujer embarazada fue asesinada por su ex pareja el pasado diciembre.A. DI LOLLI
  • Protocolo Interior reforzar la vigilancia sobre los maltratadores e implicar al entorno de la vctima
  • Igualdad Irene Montero admite que no hay «varitas mágicas» para evitar los asesinatos machistas y pide más recursos y formación

La experiencia de los agentes de la Guardia Civil que luchan contra la violencia machista es inversamente proporcional a la percepción de Fernando Grande-Marlaska, al que agita cualquier alusin al manifiesto deficitario de las plantillas. Los efectivos del grupo especial VioGn llevan mucho tiempo alertando de que no son necesarios para atender las necesidades de las vctimas ni en mero ni en medios materiales. Con un cierre catastrfico de 2022 -11 mujeres asesinadas en diciembre- y la nefasta entrada en 2023 -tres crmenes en una semana-, las imperfecciones del sistema chocaron contra el ministerio reviviendo las voces criticas en los equipos especiales que el ministro no incorpora a la ecuación.

Un agente de este grupo del Instituto Armado denunció por EL MUNDO la realidad de unas unidades estranguladas por las circunstancias a las que no le salen los nmeros ni en tiempo ni en forma. Estamos excededos, faltan agentes, no llegamos a todo y al final, desgraciadamente, las vctimas son las que lo pagan, lamentad.

El equipo VioGn del extrarradio de la capital provincial al que pertenece -este ejemplo es extrapolable a todos los del pas- está formado por tres agentes para una población próxima a 60.000 personas. En este momento, tal como reveló, tienen 90 casos activos de violencia machista qué revisar, seguir y esperar. El limitado horario de trabajo -de lunes a viernes maana y tarde y los sbados y los domingos slo por las maanas- complica el desarrollo de las actuaciones y tambin merma la unidad ya que la persona que hace el fin de semana descansa dos das de diario .

A efectos prácticos solemos ser dos y esto tiene éxito en todos los equipos del paso, con lo que muchos das son extenuantes en un mbito tan delicado como este, preciso. Su ocurrido: recoger la denuncia de la mujer que acude al puesto, hacer el seguimiento de la vctima y del agresor -a travs de llamadas telefnicas y entrevistas personales- y, por ltimo, realizar una valoracin del riesgo. Ah acaba la función -por una cuestión de capacidad- de quiénes son el primer escalán en la lucha contra la violencia de género y de cuyas conclusiones depende el seguimiento.

Estamos sobrepasados, y las vctimas lo sufren

Una vez ejecutadas estas gestionadas, la vigilancia en base al peligro que han detectado los agentes especialistas corresponde a sus compañeros de Seguridad Ciudadanauna unidad que tiene otros cometidos y que, como ellos, tambin est bajo mnimos.

Si el equipo VioGn establece el nivel no apreciado, una patrulla pasa a entrevistarse con la vctima como mnimo una vez al mes. En caso de que el riesgo visto sea bajo, la visita ocurre una vez cada dos semanas. Cuando es medio, los efectivos de Seguridad Ciudadana acuden una vez a la semana. Si es alto van una vez al día si es extremo, la vigilancia es 24 horas y, en esos casos que suelen ser residuos dentro del universo de los malos tratos, los agentes van de paisano.

La patrulla de Seguridad Ciudadana realiza la contravigilancia compaginándola con cualquier altercado relacionado con su trabajo como puede ser, por ejemplo, un robo, una ria o el atraco a un banco. Desatienden sus funciones y, cuando no pueden estar en dos sitios a la vez, acude una patrulla de otra demarcación dejando sin vigilancia sur zona y se corre el riesgo de que no se atienda con la urgencia qu’requiere la contravigilancia de VioGn. Es el pez que se muerde la cola.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska (izda.), y el director general de Coordinación
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska (izda.), y el director general de Coordinación y Estudios, José Antonio Rodríguez González.EFE

Es imposible lograr una protección integral en condiciones a todas las víctimas con los que somos. Completamente imposible, aconsejo. Muchos de los efectivos de VioGn han sido transferidos desde Seguridad Ciudadana y se han formado, tal como indica, en un curso exprs telemtico de tres das. No hay formacin especializada, como debera ser, para una problemtica tan grave como esta, llena de recovecos, y en la que hace falta mucha sensibilizacin con las vctimas, denuncia.

Tampoco cuentan con seguro, con los medios materiales necesarios. Cuando vamos a hacer entrevistas personales a una casa or a cafeteria, tenemos que pedir los camuflados coches a otras unidades y los ordenadores que tenemos para tramitar los asuntos son heredados de otros despachos. El guardia civil alerta de que la situacin est lejos de reconducirse de no crearse ms plazas en el Instituto Armado. Mientras no se aumenten las plantillas, va a seguir teniendo asesinatos, sentencia. A rengln seguido, el experto en violencia machista expresa un pesar compartido, dice, por muchos de sus compaeros. Nuestros sentimientos totalmente frustrados. Los primeros preocupados somos nosotros con todo lo que sucede y el miedo a lo que pueda pasar en un futuro.

Tenemos que pedir los coches camuflados a otras unidades

El agente profundiza en el problema y vuelve sobre la misma reivindicación que hace aos sobrevuela el Ministerio del interior. La nica solucin es reforzar las plantillas de la Guardia Civil en todos los sentidos. No vale quitar a agentes de un sitio para ponerlos en otro porque como siempre estaremos cojos. Hay un déficit manifiesto de agentes en el Cuerpo y muy pocas patrullas para abordar la realidad delictiva que tenemos en general. El guardia civil, no obstante, es realista y asume que no existe una protección ideal. Sabemos que hay situaciones imposibles de controlar pero también sabemos que no podemos seguir como.

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